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Soy profe y estoy cansado, ¿y tú?

  • Rubén 

“Los profesores tenéis 3 meses de vacaciones y cobráis un sueldazo, no sé de qué os quejáis.” Lo habré oído varios cientos de veces y todas ellas habré intentado disimular mi malestar con una tímida sonrisa. A veces se me habrá notado y a veces no, pero siempre intento comportarme con educación.

La sociedad en la que vivimos tiene la falsa creencia de que la cantidad de trabajo realizado se mide en horas de presencia como si solo con estar ya fuese suficiente para merecer más que otro y así tenemos esas jornadas interminables pero nada productivas tan frecuentes en determinados sectores. Después comparamos las jornadas de 10 horas con las de 5 y vienen los problemas. Que si este trabaja poco, que si tiene trabajo fijo, que si cobra mucho…

Además, por alguna razón tendemos a pensar que el trabajo de los demás es siempre más fácil y está mejor pagado que el nuestro y tendemos a desprestigiar a los que consideramos privilegiados. Pero son privilegiados porque lo decimos nosotros,  desde nuestro incuestionable punto de vista que es el único válido por el nada desdeñable motivo de ser el nuestro, no porque lo sean en realidad. ¿Recordáis el dicho de que los peores dolores son los propios porque los otros no te duelen a ti? Más o menos lo mismo.

Cuando llevas a tus hijos al pediatra a una revisión, básicamente los pesan y los miden y piensas “Eso bien podría haberlo hecho yo en mi casa” pero el día que se ponen enfermos, te das cuenta de que ese señor con bata blanca vale su peso en oro por el simple hecho de que sabe qué hay que hacer cuando es necesario saberlo. Sin embargo, cuando llevas a tus hijos a la escuela no sientes que la persona con quién se quedan tenga ningún valor especial, lo que va a enseñarles a tus hijos, tú ya lo sabes. Es sencillo, ¿no?

La verdad es que hay una creencia bastante generalizada entre nuestros responsables de la clase política de que nuestro trabajo, el docente,  puede hacerlo cualquiera y, bajo esta premisa, es muy complicado convencer a la sociedad de la trascendencia del mismo.

La administración es la primera que apoya este razonamiento obligando a los docentes a impartir materias de las que no son especialistas y es que “a un chaval de 12 años le puede explicar lengua hasta una cabra” y así nos va. Luego se les llena la boca hablando de calidad y tal… Mientras, en la vida real, el profe de filosofía imparte historia, lengua castellana, latín y música, vigila el patio, presta libros en la biblioteca y atiende el comedor escolar.

Además, hay que entender que a edades tempranas, la enseñanza es mucho más complicada que en la edad adulta. Dar una charla sobre programación orientada a objetos a alumnos universitarios supone bastante menos esfuerzo que enseñar a sumar a chavales de primaria. Lo primero sólo requiere de conocimientos, lo segundo precisa de un don que no todos tienen.

Imaginaos por un momento un aula de 25 críos de 6 años, 5 horas seguidas cada día intentando que aprendan a leer, a estarse quietos en la silla, a pedir permiso para ir al baño… La mayoría de nosotros saltaríamos por la ventana en nuestro primer día de trabajo y eso con 30 años, si lo tuviésemos que aguantar con más de 60 no os digo nada.

El trabajo docente requiere del 100% de atención, es un trabajo intenso, no se puede bajar la guardia. Nada tiene que ver el trabajo en el aula con otro que puedas desempeñar mientras charlas con tu compañero. Por no hablar de la responsabilidad de formar académica y moralmente a las personas que sostendrán al país en pocos años.

Y no basta sólo con esbozar una sonrisa cuando nos imaginamos saltando por la ventana mientras dejamos atrás a una jauría de niños gritones. Sé que la mayoría os dais cuenta de que lo que digo es cierto, que a nivel mental el trabajo en el aula es agotador y que requiere de periodos de descanso amplios para garantizar una vida laboral medianamente larga. Sin embargo, cuando salen a relucir las nóminas y los periodos vacacionales se os olvida.

Que los salarios de la clase trabajadora de este país sean una mierda (sí, con todas las letras) no es culpa de los docentes, es más, yo digo que también el salario de los docentes es una mierda. 25 años estudiando para conseguir un trabajo a una hora de coche de tu casa que cambia de localidad cada año y que no consigue estabilizarse hasta pasados los 40 no me parece tan idílico.

El salario de un maestro gallego recién titulado ronda los 1500 euros netos al mes, en secundaria puede subir hasta unos de 1650. Doce nóminas, las pagas extra ya casi no existen desde que empezó la crisis. Ahora haced cuentas, y os saldrán poco más de 10 euros por hora de clase (que no de trabajo) y al mismo tiempo pensad en cuánto os cobra el técnico que arregla la caldera, el dentista por un empaste o lo que cuestan una noche de hotel o una cena para dos en un restaurante.

Claro que las clases las puede impartir cualquiera y un buen solomillo sólo saben prepararlo unos pocos. ¡Qué aproveche!

Aclaraciones a posteriori

Cuando publiqué esto, no sabía que tendría tanta trascendencia. Parece que a la gente le importan más mis vacaciones que mi trabajo y eso es algo que habría que meditar con calma. He decidido dejar de responder a los comentarios que hacéis porque pienso que empiezan a ser repetitivos y tampoco quiero darle vueltas  a lo mismo eternamente. Sólo algunas puntualizaciones:

Debo pedir disculpas a los docentes universitarios por mi nada acertada comparación. Sólo pretendía hacer ver que la dificultad de los contenidos a impartir no determina la dificultad sobre cómo hacerlo pero puede parecer y de hecho parece que no valoro en absoluto vuestra tarea, nada más lejos de la realidad.

Aclarar también que no soy maestro, ya dije más arriba que no podría. Trabajo como profe de matemáticas (o lo que surja, por desgracia) en secundaria y bachillerato. Soy licenciado en matemáticas, no he estudiado magisterio ni turismo ni medicina, no puedo saber cuánto de difíciles son esos estudios ni cuanto trabaja un médico o un albañil. Sí he trabajado en la empresa privada, he tenido trabajos con jornada de 8 horas y he trabajado de noche. A la mina no he bajado nunca aunque a alguno le gustaría.

No me gusta opinar sobre lo que no sé y nunca solicitaría que a otros trabajadores se les complicase su situación laboral por el hecho de no poder mejorar la mía. Respeto y admiro a todos lo profesionales porque creo que saben mucho más de lo suyo que yo. Reivindico mi derecho a quejarme de lo que me plazca y a estar cansado después de una jornada de trabajo, nada más, intentando hacer entender lo que supone entrar en un aula cada día.

A los que habéis enviado comentarios con insultos y descalificaciones, decir sólo que no los voy a publicar por respeto a vosotros mismos, porque quedaríais demasiado mal retratados. Seguramente peor de lo que os merecéis.

Los demás comentarios los seguiré aprobando siempre que estén redactados con un mínimo de respeto.

Un saludo y gracias por leerme.

198 comentarios en «Soy profe y estoy cansado, ¿y tú?»

  1. El que lleva la contraria

    ELIC, un pequeño apunte, te explico, que tengas trabajo es BUENO, que tengas un minimo de 3 meses de vacaciones pagadas es BUENO, que cobres mucho es BUENO. Que estes maltratada es MALO y un delito, asi que no acabo de ver la similitud por ningun sitio.
    Si te leieste mi comentario enterito no has entendido nada, si un profesor segun tu tiene derecho a quejarse por sus condiciones laborales, ¿que tendrian que hacer el resto de trabajadores?, que en muchos casos son explotados, ya sea en cuestion de horarios, remuneracion, vacaciones… la vida laboral no es la que se muestra en los anuncios de tv, donde todo el mundo va a la oficina y se lo pasa muy bien y luego tienen tiempo para ir al gimnasio y hacer actividades con su pareja e hijos, pues no, hay mucha gente trabajando en antros donde no ven la luz del sol, pasando calor en verano, frio en invierno y haciendo vacaciones quando la enpresa le obliga, ya sea en mayo o octubre. No se, decide tu misma si estas personas tienen o no derecho a quejarse igual o mas a los profesores.

    1. Tu analisis es el siguiente: Como hay personas con trabajos más precarios en los que son explotadas, los profesores no tienen derecho a quejarse, ¿es correcto?.
      Que lo digas por los futbolistas de élite y en lunes muy temprano, quizás lo entenderia.
      Para colmo, dices que las cosas no son como salen en los anuncios de tv, ¿nos hemos caido de un guindo?, ¿eres maetro?, ¿sabes que es serlo?, seguramente no,por tanto quejate de lo tuyo, de lo que conoces y no le reste el derecho a quejarse a nadie.
      La lógica no consiste en bajar los sueldos a los maestro para que gente como tú esté contenta, consiste en reivindicar una subida del mismo para quien lo tenga bajo.

  2. Decirle a un profesor que no se queje porque tiene un trabajo o vacaciones o cobra mucho es como decirle a una mujer maltratada que no se queje porque esta casada. Soy técnica deportiva, adoro mi trabajo, trabajo con gente adulta y con niños y mi sueldo es correcto (siempre podría ser mejor) con la crisis hemos tenido que reinventarnos, titularlos en todos los campos posibles para poder ocupar puestos de trabajo que jamás volverán a tener un especialista para ese área, nos han bajado durante 2años un 5%, han despedido a un 15% de la plantilla y llegado a acuerdo con un 5%, y aún con todas sus pegas, sigo amando mi trabajo y puede que un profesor cobre más y tenga más vacaciones pero no les cambiaría su puesto por el mío jamás, tengo una niña de 19meses a la que llevo a la guardería, pago un pastón! Es lo que más escuchas entre las madres del colegio … Amigos! Pagamos poco!!! Si vierais la cara de mi bebe al ver a las educadoras, esa sonrisa y ese amor hacia ella.Y las profes y ayudantes cobran una auténtica (mierda) . La educación, el cariño y la formación de las personas no tiene precio, ni descanso. Quéjate preciosa! Os tendrían que cuidar y valoraros muchísimo más.

  3. El que lleva la contraria

    Esta muy bien que defiendas a capa y espada tu poosicion, pero aun que reivindiques que el resto entienda tu posicion, tu no entiendes la de los demas. Como autonomo que soy no tengo asegurado el trabajo la semana que viene, tu si, por supuesto es impensable que tenga unas vacaciones estivales de 3 meses, eso sin contar las del resto del año (semana santa, navidades, y algunos dias mas), si quiero tirar adelante a una familia, y en cuanto a la presion podriamos hablar mucho de eso, mientras tu tienes unos niños presionando, yo tengo a unos jefes o encargados exigiendo resultados porque la fabrica no puede estar parada, eso sin contar los horarios a veces completamente absurdos en que me tocan trabajar. Asi que en todos sitios cuecen habas, no creo que las condiciones laborales de un profesor y las mias y muchos otros den para que os pongais ha llorar por las criticas recibidas, mas bien deberias estar contentos de ser funcionarios y poder acogeros a todos los beneficios que eso conlleba.

    1. No entiendes nada. Si no quieres ser autónomo, no lo seas. Estudia como hice yo, y mucho….a ver si eres capaz…y aprueba unas oposiciones (no son de las más duras, cierto, asi que suerte) y cuando estés en mi lugar…entonces..quizás solo, lo empieces a entender. Si yo fuera autónomo….si yo fuera…pero no lo soy, asi que hablamos de lo nuestro y te aseguro que yo desde mi posición de maestra, le doy mucha credibilidad, importancia y respeto a las demás profesiones, porque todas son necesarias.
      Gracias por tu comentario.
      Marga

      1. He entrado solamente para contestarte, Marga.
        ¿Crees realmente que los autónomos no tienen suficientes estudios y/o titulación? Porque con ese comentario es lo que das a entender.
        Y otra reflexión. ¿Crees que un autónomo es autónomo porque quiere? ¿Te crees que no le gustaría tener 14 pagas al año y 30/60/90 días de vacaciones en verano?
        Trabajas de lo que quieres y para lo que has estudiado y nadie tiene por qué aplaudirte por ello, puesto que es tu obligación. Yo no me quejaría mucho… No vaya a ser que un día tengas que abrir un negocio por tu cuenta, seas autónoma y te venga otra «Marga» a decirte «Haber estudiado» o «Si no te gusta, no haber abierto el Bar» (por decir un negocio al azar). Créeme que no te gustaría, te lo aseguro.
        Saludos.

        1. Entonces el autónomo lo es por obligación y el docente lo es porque le apetece. Gran razonamiento…

          No pedimos aplausos, pedimos respeto. Estamos hartos de que la gente critique nuestras condiciones laborales sin tener idea de lo que es meterse en un aula cuando nosotros no criticamos las de los demás. Si cada uno se dedicase a lo suyo nos iría mucho mejor.

  4. Sólo te agradeceré que me hayas hecho reír en un par de ocasiones mientras leía:
    -25 años estudiando. .. imagino que computan hasta los años de guardería, no? En mi opinión (sólo mi opinión), para decir que una profesión te ha costado X años de estudio, sólo deberían computar a partir de la educación obligatoria (como mucho). Puesto que cualquier persona de cualquier puesto de trabajo debería haber completado la obligatoria.
    -que los maestros y profesores deban descansar por largos períodos debido al esfuerzo de su trabajo… Permíteme dudar de que alguien en la administración (que ya conocemos su funcionamiento) haya pensado en eso. Los descansos y vacaciones están pensados y adaptados a los niños y a los estudiantes. Y a vosotros os tocan por consecuencia. Consecuencia de que no se sepa o no se molesten en administrar mejor al personal público.
    El resto de mi opinión debe quedar bastante a la vista.
    Gracias por este rato de entretenimiento.
    Un saludo
    Porque lo único que puedo comprender del enfado general del profesorado, es que a cualquiera nos molesta que nos quiten lo que teníamos y considerábamos nuestro para siempre.

    1. Y ya te gustó a ti cuando fuiste estudiante, tener dos meses, ¿no? ¿Y con todo lo que sabes por los medios de comunicación no crees que son merecidas? Es más, muchos usamos esos meses para preparar lo próximo, el curso venidero. ¿No te parece que nos merecemos las vacaciones y algún reconocimiento por parte de los demás de nuestra labor? ¿Tan mal lo hacemos todo o es que el peor pecado es cobrar sueldo fijo (más bajo que hace cuatro años, sin los incentivos de sexenios, ni cobrar por cargo en el centro) y tener dos meses de vacaciones? ¿Sabes qué es estar en julio dando clase? Pregunta a tus hijos, si los tienens, si estarían dispuestos o qué gracia les haría. No, mejor. Imagina cuando tú ibas a clase, imagina a tus padres diciéndote que te fueras a clase a estudiar mates a 40 grados a la sombra, sin A/A, escuchando a los profes… No seamos egoístas…

      1. Yo no pongo en duda que hagáis bien o mal vuestro trabajo. Habrá de todo como en todos lados. Encuentro que está mal que os quejéis tanto con todos los privilegios que tenéis.
        Ya dije que las vacaciones están adaptadas a los niños. No me imagino a un niño estudiando en julio y agosto, no. Pero sí me imagino a un albañil (u otros empleos) trabajando bajo el sol en julio y nadie les pone tres meses de vacaciones. Como también me puedo imaginar a los profesores llevando las escuelas de verano y se ahorraría mucho.

        1. Sus quejas estan relacionadas con las críticas que se vierten sobre ellos,no están reivindicando nada. ¿Privilegios?, ¿a que te refieres?, no tienen nada que no se hayan ganado, y si tu ilisión es tener esos «privilegios»,la universidad está para todos.
          A ver si nos enteramos que los niños no son papeles,ni ladrillos ni muebles (ya les gustaria a muchos padres), son personas que actuan con independencia provocando tensión constante a sus maestros, los cuales no pueden hacer un kitkat cuando quieren. El nivel de estrés en el profesorado es muy superior al de cualquier otra profesión He de mencionar q

          1. He de mencionar que también tienen que lidiar con los padres, gente como tú que carece de total empatía.
            Comentas lo de las escuelas de verano, creo que te lo he dicho antes, tu problema es que no sabes que hacer con tus hijos en verano.
            Intenta mejorar tu situación laboral , pero criticando la de los demás no consigues nada.
            NO me dedico a la enseñanza.

            1. Claro que sabemos lo que hacer con los niños en verano: escuelas de verano!
              Pero porqué hay que pagar a otros para que lo hagan? si ya estamos pagando a los maestros y profesores mientras están en la playa. Te gustaría pagar a dos fontaneros para que uno haga el trabajo y otro descanse porque ya trabajó mucho ayer y hoy le toca descansar?
              Si todos quisiéramos ser profesores, evidentemente no habría puesto para todos y muchos de los que lo son ahora no lo podrían ser. A mí no me gustaría serlo. No voy a dedicar mi vida a algo que no me gusta sólo por tener más vacaciones. Puede que ese sea uno de los problemas de algunos, la falta de vocación y que trabajan en esto sólo por otros motivos.

            2. Solo me gustaría matizar el comentario de que es la profesión con más presión. Sería interesante poder comparar de forma científica esa presión junto con la de un cirujano o con la de un bombero.

              Decir «lo mío mas…» no lleva más que a un debate absurdo. Toda profesión puede ser complicada y dura, pero deberían preparar a quién la aprende para ello.

              Y, como siempre, estos debates siempre aparecen por un agravio comparativo, siempre realizado con un pensamiento negativo, entre profesionales de diferentes campos.
              Quizás podríamos dejar de discutir por lo que tienen los demás y empezar a reclamar lo que pudiera ser que merece nuestra propia profesión.

              Muchas gracias por tu opinión.

            3. Pués lo estás dejando bien claro. Tu problema no son las vacaciones de los maestro, tu problema es que necesitas una guarderia para verano y me temo que los colegios no lo son. Los profesores están para enseñar no para sacarte de apuros por que tu situación laboral no te permite hacerte cargo de tus propios hijos. Por que hasta ahora no he leido a nadie cuyas críticas esten basadas en la preocupación por el aprendizaje de sus hijos (tres meses sin hacer nada).
              Tu problema es otro, y no tiene nada que ver con las vacaciones de los demás.
              No se cual es tu situación laboral ni familiar. En mi caso, mi mujer trabaja y yo ,al tener el primer hijo, tomé la difícil decisión de quedarme en casa al cuidado de nuestros hijos. Asi no tengo que pargar dos profesores como tampoco a dos fontaneros,no necesito exprimir a los abuelos y cuando mis hijos tienen fiebre, no les doy apiretal y los mando al cole. Por supuesto comen en casa. Mi mujer no tiene un gran sueldo,por lo que nos conformamos con una tv de 32 y no de 50 pulgadas último modelo (por ejemplo). Prioridad absoluta ,los hijos .

      2. El problema Raquel, es que tú quieres que nos ocupemos de los críos en nuestras vacaciones. Es decir, quieres que nuestras vacaciones se reduzcan para ahorrar, pero para ahorrar a nuestra costa porque no entiendes que un incremento de jornada laboral debería venir acompañado de un aumento de salario.

        También se ahorrarían costes si en las horas de guardia reparásemos la caldera, limpiásemos el baño y pelásemos patatas en la cocina del comedor. Al salir, podríamos condcuir el bus escolar y, de paso, según vamos dejando a cada alumno en su casa, subimos un momento y les hacemos la cama para que se puedan quedar durmiendo 5 minutos más por la mañana.

        Es impresionante ver lo simples que pueden llegar a ser los razonamientos de la gente. Te voy a decir yo como ahorrar costes muy fácilmente: Poner a los profes a dar clase y nada más… Si nos librasen de las tareas administrativas, guardias y vigilancias de patio y de bus( Tareas para las que no se requiere titulación universitaria alguna) quedarían un montón de horas disponibles para hacer lo que se supone qeu debemos hacer: Impartir clase.

        Ahora bien, el día que mi periodo estival se equipare al resto de funcionarios del estado, ese día exigiré que mi salario también lo haga. Y, desde luego, la calidad de mi trabajo no será la misma, lo pagarán los críos, como siempre.

        1. Jajaja
          Es un debate interminable. Que siempre acabáis llevando a la exageración para tratar de justificaros.
          No estoy de acuerdo con tu punto de vista, eso está claro. Ni tú con el mío. No intento convencerte. Sólo aclararos ese descontento general que no entendéis.

          1. Ahí está el problema. Que tenemos que justificar algo cuando no debería ser así. No nos quejamos de nuestras condiciones, que podríamos. Nos quejamos de tener que pedir perdón por ellas.

            Ese descontento del que hablas, párate a pensar de dónde viene. ¿Molesta que yo no trabaje el mes de julio?¿Por qué? Si la respuesta es porque tú si tienes que trabajar y yo no, me temo que estamos tocando uno de los pecados capitales.

    2. Pingback: Sobre la función del educador | Blog de Susana Frisancho

    3. De acuerdo con prácticamente todo lo que dices. Y como siempre digo, quien quiera «ese gran sueldo con esas pedazo vacaciones» que curse una licenciatura en la universidad y que se pegue años opositando, y entonces tendrán ese «nivel de vida tan bueno». Es muy fácil criticar a los funcionarios; de hecho, los que más los critican, son los que no tienen las pelotas de pasar por la dificultad que supone un concurso de oposición como es el de profesores de secundaria.

    4. Yo soy alumna de 3° de la ESO, y apoyo todo lo que dices. Veo a mis propios profesores desesperados intentando dar clase a 30 personas, el 80% de las cuales pasa de todo. Luegos los alumnos suspenden y los profesores son los que tienen la culpa, y «que malo es el profesor que me suspende». Creo que para lo que tenéis que aguantar, son pocas vaciones y poco salario, eso sin contar con que formáis personas para que lleguen a ser algo algún día.
      Se que puede parecer raro que una alumna sea la que diga esto, pero es algo que llevo diciendo desde hace mucho tiempo. No me parecen justos los comentarios irrespetuosos de alumnos y padres a los profesores, y ,desgraciadamente, esos comentarios abundan…
      Añado a todo esto que lo que me gustaría estudiar es matemáticas, y ser profesora de matemáticas en un instituto, este gusto por las matemáticas se lo debo a un profesor que tuve el año pasado…. Creo que con esto no hace falta que diga lo mucho que puede hacer el docente por un alumno, como en mi caso que puede llegar a ser hasta un guía.
      Saludos

    5. Hola, yo sí soy maestra y estoy totalmente de acuerdo con tu escrito. Yo también estoy cansada de que la gente sólo vea lo que les interesa de esta profesión.
      Afortunadamente amo mi profesión y no la cambiaría por nada, a pesar de los pesares. Pero es agotadora física y mentalmente. Estar con 25 niños no es sólo darles lengua, mates o inglés, es educarlos en un todo que parece que a muchos se les olvida, es una prolongación de la vida y es un camino a recorrer junto a la familia. Los niños en el colegio conviven, se relacionan, pero necesitan de unas orientaciones que los maestros damos con todo nuestro cariño y de la forma que creemos que va a ser la que mejor los forme. En fin, podría dar mil argumentos pero no vale la pena…. sólo una cosa para los que tanto nos critican: si tan bonito es tener tantas vacaciones, si tan maravilloso es el sueldo, ¿por qué esas personas no se decidieron a estudiar la carrera, luego opositar y a viajar por muchos años conociendo localidades que jamás habías oído? el camino está abierto para todos…

    6. Pierdes la razón por lo mal escrita que está tu reflexión; de hecho, he preferido no leerla entera, porque se aproxima más al texto de un político que al de un profesor. Espero que les enseñes a tus alumnos a redactar con coherencia, a puntuar bien y a poner las tildes y cursivas donde deben ir.

      1. Con 25 alumnos es complicado, y teniendo una relación de (al menos en primaria) 25 sesiones a impartir semanales y 5 horas semanales para prepararlas, también. Por mi parte creo que, como se ha dicho anteriormente, los maestros, si a veces nos quejamos, es por las críticas que se vierten sobre nosotros, bajo el supuesto aparente de que todo el mundo conoce nuestra profesión (cuando en realidad se empieza a conocer al trabajar en el colegio, no al pasar por él como alumno). Las vacaciones estivales, que para los maestros son de dos meses y no de tres por cierto, se agrupan en el verano principalmente debido al calor que impediría la labor intelectual o de concentración que se les exige al propio docente y a sus alumnos. De hecho, España no es el país de la Unión Europea con más días festivos en los centros educativos; la diferencia reside en que en países de clima más frío se pueden repartir más equitativamente a lo largo del curso y entonces llama menos la atención.
        Todo es comprensible: esos dos meses seguidos llaman la atención de quienes tienen menos vacaciones y eso lo interpretan como un privilegio. Ante eso solo cabe una serie de reflexiones: ¿qué es más importante, que el docente haga su trabajo correctamente y en condiciones adecuadas o que tenga menos vacaciones para que el resto sienta un menor agravio comparativo? ¿Nos molesta por ejemplo también que los controladores -tengo oído, disculpad si me equivoco- tengan bastantes vacaciones también y/o periodos de descanso bastante amplios, además de un gran sueldo, o creemos que eso debe ser así con tal de que su trabajo esté bien hecho? Sería muy discutible (y desde luego estúpido liarse a comparar) qué es más importante, si que el avión aterrice bien o que el niño reciba unas clases adecuadas. Lo importante es que cuando nos comparemos, en lugar de dividirnos -que es lo que al que está por encima de nosotros, que no es ni profe, ni médico ni ama de casa, le viene mejor-, nos unamos o al menos respetemos sin comparaciones ni ataques desde el desconocimiento, para que todos, cada uno en su trabajo, consigamos mejoras en nuestro puesto. Como maestro, la sociedad ganará no cuando yo tenga menos vacaciones, sino cuando mi labor se libre de rellenar documentos o me ayude a recibir una formación continua, o si a otros profesionales tienen mejor sueldo y jornada continua o cuando el dinero se destine a mejorar la seguridad en el trabajo.

    7. Teniendo en cuenta lo que se exige en otros países de Europa para ser profesor y formar a futuros adultos, y la mierda que se exige aquí… Dicho todo.

      1. Que se exija una mierda no lleva a que todos estemos al límite. Que se exija un 5 em magisterio no implica que alumnos de matrícula no lo cursen. Que se exija una licenciatura no implica que al finalizar mi doctorado optara por entrar a dar clase en 1o de la ESO. El problema es que todo el mundo tiene una idea formada y cree conocerlo todo. Por cierto, trabajo en concertada. En el centro hasta el 30 de julio. De vacaciones sólo tengo el mes de agosto, y es cuando preparo materiales si lo necesito para el curso siguiente.

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