Aunque ha sido un poco rara y no tengo mucho que contar, supongo que por las fechas en las que estamos, mi temporada ha terminado.Comenzó a finales de mayo de 2011, tras un segundo año magnífico y muy difícil de superar, empezaba con nuevos retos:
- Bajar de 1h23′ en medio maratón.
- Bajar de 37′ en los 10km.
- Bajar de 5’10» en la milla.
Como siempre, objetivos complicados pero factibles y los primeros entrenamientos dieron sus frutos muy rápido, lo que me hizo ser optimista.
Lo primero que hice fue correr una carrera, al igual que terminé la temporada pasada, empecé corriendo una milla simplemente para ver cuanto había perdido con los días de descanso y los entrenamientos suaves, en Ames hice 5’23» perdiendo 10 en relación a la marca de Padrón, pero aún así muy contento porque era una marca decente para no haber entrenado nada.
Al poco corrí un 5000 en Maceda, sin objetivo. Nunca había corrido esa distancia así que el 18’58» es mi mejor marca hasta la fecha, aunque tengo pasos por el km5 en diezmiles bastante mejores que eso :). Lo mejor fue el debut de mi hija Candela que, aunque de la mano, completó sus primeros 100m de carrera.
Poco apoco empecé a meter cuestas y fartleks, para a finales de julio correr la carrera de mi debut, que siempre uso para comprobar mi estado de forma a principio de temporada en unos magníficos 19’05», a un ritmo medio de 3’36» mejorando en un minuto la marca del año anterior.
La temporada prometía, adelanté las series para llegar fino a la media de Pontevedra y salieron genial, llevaba ritmos muy cómodos por encima del objetivo cuando todavía faltaba más de un mes para la carrera. Me parecía que 1h23′ se me iba a quedar corto y que estaría más cerca de 1h20 que de otra cosa, pero…
Mi segunda hija nació a finales de agosto y con ella vinieron, otra vez, las noches en vela, la falta de descanso, las prisas para entrenar… lo típico de los primeros meses. Como es lógico, mi nivel empezó a bajar.
Pero claro, estaba tan cerca, ya no faltaba nada, un mes y cumpliría el objetivo, después podría relajar unas semanas para cambiar hacia el plan de 10km, apreté los dientes y, aunque costaba no bajé el pistón.
El resultado fue el que tenía que ser, a tres semanas para la gran cita, corriendo el tercer relevo del Maratón do Miño como un rodaje de calidad me lesioné.Un pinchazo en el tendón de aquiles izquierdo mitad de carrera. No iba muy forzado, había calentado bien, corría sobre tierra pero… terminé la carrera aunque perdiendo más de 2′ con respecto a la marca del año anterior.
Hielo, ibuprofeno, estiramientos, descanso… nada funcionaba y Pontevedra se acercaba. Mi nivel descendía y las opciones de lograr el objetivo bajaban. Con miedo de romperme si competía, consulté a un traumatólogo antes de hacerlo, me dio el ok y corrí, pero en algo más de 1h25 fracasando en el intento.
La lesión no remitía, el trauma quería infiltrarme y a sabiendas de que sería la última en una buen temporada corrí la San Martiño en 38’29», unos segundos más rápido que el año anterior, pero lejos de mi MMP.
A partir de ahí todo fue un calvario, traumas, fisios, más traumas, más fisios, descanso, bicicleta, elíptica, m´sa descanso, pesas, más traumas, más fisio, intentos fallidos de vuelta a la carga, lesión en el tendón derecho, fascitis plantas asociada…
Tras probar muchas cosas y harto de todo, la EPI (aunque yo diría que el tiempo también) hizo que las molestias en el aquiles me permitiesen salir a trotar a primeros de marzo.
Desde ese día he ido incrementando el kilometraje y la intensidad hasta hacer entrenos casi normales de pretemporada. Empezar casi de cero es duro, pero mejoro más rápido de lo esperado, la fascitis me molesta bastante todavía pero el aquiles está dejando de dar la lata.
Para esta temporada que entra el único objetivo es superar las molestias del todo, o lo máximo posible y después, preparar alguna distancia más corta.
Me saco el sombrero por la constancia y el empeño que has puesto en superar esa lesión tan complicada, y durante la cual tuviste que pasarlo muy, pero que muy mal.
La temporada fue la que fue, pero en la que viene estoy convencido que vas a disfrutar muuuucho corriendo.
Un abrazo y saludos a la familia.
Bueno, el plan es dejar atrás todas las molestias y luego ya se verá :).
Cómo cuesta deshacerse de todo esto!
Saludos